S.E. Gaden Nyari Tritul Rimpoché

Nota autobiográfica:

Nací en el año 1.977 en el sur de la India, según el calendario tibetano, el día 15 del primer mes del año 2.104, un día de luna llena y coincidiendo con el día en que Buda Shakya Muni realizó muchos milagros.

Cuando tenía 4 años me reconocieron como la tercera reencarnación del LXXXIX Gaden Tripa. El gran Lama Tsongkapa nació en el 1.357 en Tíbet y fundó la tradición Guelukpa y el monasterio de Gaden en el año 1.410. Desde esta fecha empezó el linaje del Gaden Tripa. (…) Hasta ahora ha habido 101 Gaden Tripa. Me consideraron la reencarnación del número 89 Gaden Tripa. Casi todas las reencarnaciones de este linaje se llaman “Tritul”.

Desde 1.981 hasta el año 2.000 estuve toda mi vida en el monasterio, allí aprendí muchas cosas, no solamente las enseñanzas de Buda, también literatura y estudios generales.

La vida en el monasterio era físicamente dura para un niño porque nos teníamos que levantar todos los días a las 5,30 de la mañana y nos acostábamos a las 12 de la noche. Desayunábamos a las 6,30 de la mañana… una taza de té y un trozo de pan.

Mentalmente no sufría casi nunca y sentía una paz interna muy especial. No añoraba nada ni sentía nunca la carencia de la familia ni de mis antiguos amigos, a pesar de que apenas tenía posesiones materiales.

Allí me enseñaron a considerar como mi familia y mis amigos a las personas que me acompañen, me encuentre donde me encuentre. Por eso, ahora, me siento muy afortunado porque donde esté, no me falta nunca la familia ni los amigos.

También aprendí que tengo que mantener una vida sencilla, pacifica y tranquila. Mantener una vida tranquila no es difícil porque la tranquilidad está siempre con nosotros lo único es que tenemos que identificar la esencia de la vida.

Un practicante budista tiene que aprender y al mismo tiempo desarrollar su espiritualidad hasta que alcance la budeidad, en realidad la vida es un aprendizaje continuo.

Durante veinte años realicé todos los estudios oficiales del monasterio y al finalizarlos deseaba pasar una temporada con mis padres así que fui a verlos y estuve un tiempo con ellos. (…) En el año 2.002 fui a Corea del Sur y un día recibí una llamada de mi maestro Ven. Gueshe Tenzin Tamding invitándome a ir a España.

En 2.004 llegué a España. Me di cuenta, tras observar profundamente, lo necesario que es el Darma de Buda en el mundo de hoy en día. Comprobé que muchas de las personas de los países desarrollados, a pesar de tener gran cantidad de cosas materiales, aún se sienten vacías, insatisfechas y con gran inseguridad.

Agradezco a Buda y a los maestros que me han transmitido unas enseñanzas tan preciosas y valiosas, por eso me siento siempre lleno, satisfecho y seguro. Y estas sensaciones que me han transmitido mis queridos maestros estoy intentando compartirlas con mis hermanos y hermanas, mis queridos amigos y amigas.